EL DIRECTOR DEL IMSS DEBIÓ VENIR A TULA PARA VER LAS PÉSIMAS CONDICIONES DEL SERVICIO
El Director del IMSS a nivel nacional, Zoé Robledo Aburto, estuvo en la obra que ya se está construyendo de la Unidad Médico Familiar 05 en los terrenos que serían para la refinería Bicentenario, ubicados en el municipio de Tlaxcoapan, y donde también se edificará el Hospital General de Zona de Tula.
El flamante director llegó al lugar y realizó un recorrido junto con los ingenieros de Cemex, empresa que lleva a cabo la obra, quienes le explicaron el proyecto, y después se fue rápidamente.
Comentamos que se fue rápidamente porque lo más correcto hubiera sido que viniera a visitar las pésimas condiciones en que el organismo que dirige (IMSS) brinda atención a los pacientes en Tula y que viera él mismo la carpa que se ha instalado en medio de las antiguas vías del tren para atender a la gente.
También debió haber observado las mini-oficinas de la calle de Atanasio Bernal, donde el personal de enfermeras y médicos «se hacen bolas» con la gente que llega a recibir vacunas o realizar diversos trámites.
Creímos que el gobierno de la 4T iba a cumplir con su promesa proselitista de estar cerca de la gente, de ver realmente lo que ocurre en el servicio que brindan y ser un gobierno diferente a los que habíamos tenido.
Sin embargo, vemos desafortunadamente que los funcionarios federales actúan de la misma forma que los gobiernos anteriores y sólo vienen, como si fueran de la élite, a supervisar obras y se retiran inmediatamente sin saber realmente lo que pasa en los pueblos y comunidades.
Otro lugar en el que debió estar Zoé Robledo es en las anteriores instalaciones del IMSS en la Calzada Melchor Ocampo, las cuales están totalmente abandonadas a 10 meses de la inundación en Tula y todo indica que nadie ha hecho la labor de limpiarlas y desinfectarlas para que se pudieran utilizar nuevamente, por lo menos mientras queda lista la Unidad Médico Familiar y el gran Hospital General que se ha planteado el gobierno de López Obrador.
Hubiera sido muy bueno que el director del IMSS hubiera visto cómo se atiende a la gente que es derechohabiente, que hablara con ellos, que escuchara su sentir sobre la atención que reciben y sobre todo, que le dijeran que muchos de ellos tienen que trasladarse a otros lugares, porque desde hace 10 meses en Tula no hay dónde recibirlos.
La gran obra que ya se está realizando en terrenos de Tlaxcoapan también ha sido muy cuestionada por la población tulense, porque el Hospital General llevará el nombre de Tula, pero no estará en este municipio, y en general a las autoridades de aquí ni se les ha tomado en cuenta para nada.
Muchos tulenses dicen que el hospital estará demasiado lejos y que mucha gente, sobre todo adultos mayores, sufrirán más para llegar hasta allá y además tendrán que gastar en pasaje, y sólo para que les digan que regresen después, como suele suceder.
Todo esto no fue tomado en cuenta por el gobierno federal y sólo se hizo en el lugar porque ya se tenían los terrenos regalados.
Veremos si realmente la funcionalidad será adecuada, no vaya a pasar lo mismo que varias obras emblemáticas del Presidente Obrador, como el aeropuerto AIFA, la refinería de Dos Bocas en Tabasco o el famoso Tren Maya. Ya veremos.